En el mundo se oyen muchas voces. En Madrid, durante la Jornada Mundial de la Juventud, el mundo oirá la voz de centenares de millares de jóvenes. Serán muchas voces que resonarán en las calles y en la plazas de la capital española y que recordarán aquella primera Pentecostés cristiana, porque se tratará de lenguas que cantarán en infinidad de idioma. Serán voces de alegría que se elevarán al cielo. Pero en algunos momentos se tratará de una sola voz proferida por un millón de gargantas que al unísono responderá AMEN a las palabras del Santo Padre.
Queridos amigos blogueros, ya quedan pocos días para encontrarnos en Madrid. El día 17 de agosto podremos iniciar lo que si Dios quiere será una tradición: el Encuentro Internacional de Blogueros con el Papa. Son muchas las dificultades que nos encontraremos, pero nos mueve sencillamente el hecho de que también nuestra voz se oiga en Madrid. Quizá si no estuviéramos allí nadie nos echaría en falta. Sin embargo, estamos convencidos de que la nuestra es una voz diferente.
La nuestra es una voz ronca, porque no nos cansamos de hablar o de gritar al mundo desde nuestras bitácoras. Muchas veces, debemos superar la tentación de callar... No importa que parezca que casi nadie nos escuche... o que la mayor parte de nuestras entradas no recojan comentarios. Poco a poco, otras voces se unen a las nuestras y son voces que proceden de lugares lejanos. Con la constancia nos sabemos parte de un coro que entona canciones todavía no escritas, improvisadas por unos corazones que se saben cercanos.
Amigos blogueros, os agradecería que hoy unierais vuestra voz para que el anuncio del Primer encuentro de Blogueros con el Papa alcance hasta los últimos rincones de la blogosfera y para que ninguno de ellos se quede fuera por no haber sido informado. La nuestra es una voz diferente: meditada, tranquila, acogedora, aunque a veces pueda también ser provocadora o desgarradora.
Queridos amigos blogueros, ya quedan pocos días para encontrarnos en Madrid. El día 17 de agosto podremos iniciar lo que si Dios quiere será una tradición: el Encuentro Internacional de Blogueros con el Papa. Son muchas las dificultades que nos encontraremos, pero nos mueve sencillamente el hecho de que también nuestra voz se oiga en Madrid. Quizá si no estuviéramos allí nadie nos echaría en falta. Sin embargo, estamos convencidos de que la nuestra es una voz diferente.
La nuestra es una voz ronca, porque no nos cansamos de hablar o de gritar al mundo desde nuestras bitácoras. Muchas veces, debemos superar la tentación de callar... No importa que parezca que casi nadie nos escuche... o que la mayor parte de nuestras entradas no recojan comentarios. Poco a poco, otras voces se unen a las nuestras y son voces que proceden de lugares lejanos. Con la constancia nos sabemos parte de un coro que entona canciones todavía no escritas, improvisadas por unos corazones que se saben cercanos.
Amigos blogueros, os agradecería que hoy unierais vuestra voz para que el anuncio del Primer encuentro de Blogueros con el Papa alcance hasta los últimos rincones de la blogosfera y para que ninguno de ellos se quede fuera por no haber sido informado. La nuestra es una voz diferente: meditada, tranquila, acogedora, aunque a veces pueda también ser provocadora o desgarradora.