4 de octubre de 2017

AUDIENCIA DEL PAPA FRANCISCO

Hoy el Papa Francisco nos habla de la Resurrección. Es el fundamento de nuestra fe y en ella apoyamos todo nuestro ser y nuestro obrar. Un creyente en Jesús vive inmerso en la alegría. Alegría de saber que no hay ningún mal que sea infinito, ni nada que no pueda cambiar por amor. Todo está ordenado a la otra vida, a la Resurrección, y el camino para llegar a ella es esta vida. 

Aquí abajo todo se acaba, pero para renacer a una vida nueva. Esa vida que hemos recibido en el Espíritu Santo el día de nuestro Bautismo. Seamos misioneros, como nos dice el Papa Francisco, llevando la Buena Noticia de la Resurrección, con alegría, esperanza y testimonios de amor, a todos los hombres.



PAPA FRANCISCO
AUDIENCIA GENERAL
Plaza de San Pedro
Miércoles 4 de octubre de 2017


Queridos hermanos y hermanas:

Octubre es un mes que la Iglesia dedica especialmente a la misión, por eso esta catequesis lleva por título: “Misioneros de esperanza hoy”. El núcleo de la fe cristiana es la resurrección de Jesús, por eso el cristiano no puede ser un profeta de desgracias. A través del Espíritu Santo, Jesús nos hace renacer a una vida nueva que debemos anunciar a los demás no sólo de palabra, sino con la vida. Jesús quiere testigos, personas que difundan esperanza con su modo de acoger, de sonreír, y sobre todo de amar. Porque la fuerza de la resurrección hace que los cristianos seamos capaces de amar allí donde parece que ya no hay motivo para amar, y de abrir espacios de salvación allí donde parece que todo está humanamente perdido. El cristiano por eso no se deja llevar del desánimo o de la queja, ya que gracias a la resurrección está convencido de que no hay ningún mal que sea infinito, ninguna noche que sea eterna, ningún hombre que no pueda cambiar, ningún odio que no se pueda vencer con amor.


Saludos:
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española, especialmente a los provenientes de España y América Latina. Pidamos a Jesús, por intercesión de la Virgen María y de san Francisco de Asís, que sepamos difundir siempre a nuestro alrededor semillas de esperanza y de amor. Que el Señor los bendiga. Muchas gracias.