Vamos
a recordar la enorme importancia que los Santos Padres han dado a los mensajes
de las últimas apariciones de la Santísima Virgen.
Conocimiento
que considero de gran interés para un blog en el que su finalidad es la de estar
“con el Papa”.
Primeramente,
me voy a referir a las palabras con las que contestó Juan Pablo II cuando le
preguntaron por el mensaje de La Salette (*):
“Estamos
en el corazón de las profecías”, y en otra ocasión la denominó “La Reina de las
profecías”
Dado
que el mensaje completo es de un profundo y largo contenido, solamente voy a
hacer referencia al principio del apartado número 30, de los 33 que lo
componen:
“Yo
dirijo un apremiante llamado a la tierra; llamo a los verdaderos discípulos de
Dios viviente y reinante en los cielos.
Llamo
a los verdaderos imitadores de Cristo hecho hombre, el único y verdadero
Salvador de los hombres.
Llamo
a mis hijos, mis verdaderos devotos, aquellos que se han entregado a mí para
que los conduzca a mi Hijo divino, aquellos que, por así decir, llevo en mis
brazos; aquellos que han vivido de mi espíritu.
Llamo
en fin a los apóstoles de los últimos tiempos, los fieles discípulos de
Jesucristo que han vivido en desprecio del mundo y de sí mismos, en la pobreza
y en la humildad, en el desprecio y en el silencio, en la oración y en la
mortificación, en la castidad y en la unión con Dios, en el sufrimiento y
desconocidos del mundo.
Es
tiempo de que salgan y vengan a iluminar la tierra…”.
Cuando
comentemos en la siguiente reflexión lo ocurrido con el Cardenal Luciano
Albino, unos meses antes de ser nombrado Papa, y el porqué de su profunda
inquietud acerca de lo ocurrido el día 13 de octubre de 1917 en Fátima, nos va
a servir para aclarar lo que la Santísima Virgen nos pide en lo que acabamos de
conocer en La Salette al hablar de los verdaderos discípulos, los verdaderos
devotos, y de los apóstoles de los últimos tiempos.
(*) Omito detalles de los datos que voy mencionando, para
evitar alargarme, y porque que, además, no hay ninguna dificultad para
profundizar en su conocimiento por medio de internet.
andrésdeMaría