La Tiara que el Papa no llegó a usar: un símbolo de otros tiempos. Hay quien no lo ha entendido |
En los próximos días escucharemos muchos comentarios sobre el anuncio del Papa Benedicto XVI de hoy. Si bien el Consistorio fue convocado para anunciar la canonización de algunos santos, entre ellos los 800 mártires italianos asesinados por musulmanes en el siglo XV, el anuncio de su renuncia fue el que capitalizaron los medios. A todos nos sorprendió el anuncio, pero hay aspectos de este anuncio que no debieran confundirnos, ni desvirtuar el valor del Pontificado, puesto que los Papas pueden renunciar. Muy pocos lo han hecho, pero sí existe
precedente. Celestino V renunció en 1296. Una vez que el Papa comunica su
intención de renuncia, es irrevocable.
La ‘renuncia’ del Papa Benedicto no debe interpretarse en el
sentido en que convencionalmente usamos la palabra ‘renuncia’. En el sentido
convencional, una renuncia implica que debe someterse a consideración de los
superiores. El Papa no tiene más superiores que Dios. En el texto que se
publicó en el portal del Vaticano, se usa la palabra ‘renuntiate’, que no
coincide con en el sentido que le damos en Español, sino que más bien implica una entrega generosa
Esta decisión debe ser libre. El canon 332
numeral 2, precisa que: "si el Romano Pontífice renunciase a su oficio, se
requiere para la validez que la renuncia sea libre y se manifieste formalmente,
pero que no sea aceptada por nadie"
Todavía no se sabe cuál sería el título que emplearíamos para
referirnos al Papa Benedicto XVI en su nueva vida de retiro. Se dará a conocer
el protocolo a seguir.
La Iglesia nunca ha
aceptado la profecía de San Malaquías, que ha sido difundida en diferentes
formas e interpretaciones. Esta profecía dice que sólo habrá un Papa después de
Benedicto XVI y que será -supuestamente- Pedro el Romano. Esta profecía es indudablemente falsa. Se dice que fue hecha por San Malaquías en 1139, pero salió a luz pública hasta 1595. Al
parecer, estaba destinada a influir la elección del Papa en ese tiempo. Por lo tanto, no debemos darle crédito y no
hay razón para promover injustificadamente la ansiedad que algunos medios han
derivado de esa profecía.
El
Papa Benedicto XVI no elegirá a ningún candidato de su predilección. Respetará el proceso de acuerdo a la norma de
Derecho Canónico. A partir del 28 de
Febrero inicia la situación de
"sede vacante", regulada, desde el punto de vista jurídico y canónico
por los textos que se refieren a la "sede vacante" en el Código de
Derecho Canónico y en la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis escrita por el Beato Juan Pablo II.
Encomendemos la elección de su sucesor al Espíritu Santo, bajo cuya presencia santificante fueron electos como Vicarios de Cristo toda la sucesión en el Pontificado, desde San Pedro el humilde pescador de Galilea, hasta el Beato Juan Pablo II, el predecesor del Papa Benedicto XVI, que todavía vive en nuestros corazones. Elevemos en nuestras oraciones también nuestra gratitud por el pontificado de Su Santidad Benedicto XVI, cuyo hermoso legado trascenderá no sólo en nuestras comunidades y en nuestras vidas, sino que también se proyectará en las generaciones futuras.
-Yvette Camou-
-Yvette Camou-
Referencias Bibliográficas:
- Aciprensa. Cobertura General. 11 de Febrero del 2013.
- Keating, Karl. Catholic Answers Website. Assorted Posts. 02-11-13.
- McKenna, Kevin E. "A Concise Guide to Canon Law". Kindle Edition. Ave Maria Press.