Señor, Tú te acercas cada día y nos llamas. Nos invitas a disfrutar en el mejor banquete. Compartes con nosotros el vino de la alegría.Quieres alimentarnos con el pan de tu amor.Y nosotros sacamos excusas y no acudimos.Tenemos muchas cosas importantes que hacer.
Creemos que tu banquete es aburrido. Despreciamos lo que más necesitamos.
Señor, danos un corazón inteligente y sabio, que sepa reconocer donde está la verdadera alegría. Danos un corazón sencillo y acogedor, que sepa recibir el amor que nos ofreces gratis.Señor. Danos un corazón generoso y universal, para salir a las calles, plazas, cruces y caminos e invitar a todos al banquete que has preparado, al banquete de bodas, que algún día será eterno. Amén.
Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.