En este tiempo deseamos que nos animemos a dar ese “paso”, el que nos haga pasar:
De la resignación a la acción.
De la indiferencia a la solidaridad.
De la queja a la búsqueda de soluciones.
De la desconfianza al abrazo sincero.
Del miedo al coraje de volver a apostar todo por amor.
De recoger sin miedo los trozos de sueños rotos y volver a empezar.
De hacer las paces con nuestro pasado para que no arruine nuestro presente.
Y de saber que de nada sirve ser luz si no podemos iluminar el camino de alguien. Amén.
Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.