Dame Señor la gracia de aprender a vivir un día a la vez dejando todo en tus Manos, mi hoy y mi mañana. Serte fiel, hoy y mañana; ser tuyo; hoy y mañana; ser dócil a tus inspiraciones, hoy y mañana; dejarme sorprender por tu amor cada amanecer, hoy y mañana; dormirme entre tus brazos, hoy y mañana; dejar todo en tus manos, hoy y mañana.
Porque hoy renuevo mi confianza en ti y mañana quiero volver a hacerlo una vez más. Pues mi fragilidad es grande y mi infidelidad me hace caer a cada instante. Porque no quiero pensar en un mañana lejano sino en un hoy donde renueve mi amor por ti. Dame esa gracia de serte fiel «Hoy y mañana» y así cada día hasta el día que me llames ante ti. Amén.