Si Jesús hubiera venido a la Tierra en nuestros días, casi con seguridad hubiera empleado la Red mundial, INTERNET, como referencia de sus parábolas. En aquella época lo hizo con las actividades más comunes -la pesca, el campo, la construcción, etc.-.
Pero es que Internet no es sólo un ámbito privilegiado de la actividad de los hombres, sino que además refleja algunas de las características del Reino anunciado por Jesús. Así, por ejemplo, varias veces Jesús comparó el Reino con las semillas: la parábola del sembrador, la de la cizaña, la del grano de mostaza. En todos estos casos, se indica que la principal actividad no es la del que siembra, sino la eficacia que hay en la semilla y en la propia naturaleza. El que siembra no tiene más que esperar a la cosecha. Pues en internet sucede algo parecido. Colocas un post, cuelgas un archivo y allí, en la Red, parece que tiene su propia vida y da sus frutos, incluso con desconocimiento de su autor.
También dijo Jesús que
- hay más alegría en el dar que en recibir.
- lo que habéis recibido gratis dadlo gratis;
- en el ámbito del espíritu lo que se da no se pierde sino que se gana: el que pierde su vida la encontrará y el que la quiera conservar la perderá.
(Escribí hace tiempo este post, pero ahora lo publico aquí porque estoy seguro de que nos animará a todos a seguir sembrando, aunque a veces parezca que nuestros esfuerzos son inútiles).