Señor, dame un corazón limpio para que te pueda ver. Señor, dame un corazón de pobre para que viva hoy tu reino. Un corazón misericordioso, para que derrame misericordia. Un corazón lleno de paz, para que sea hijo tuyo.
Señor, dame un corazón que tenga hambre y sed de justicia para que sea saciado y haga tu voluntad. Un corazón manso para que posea la tierra. Que mi corazón se alegre y se regocije hoy porque todo lo espero de Tí, Dios mío.
A tí me acojo, Señor, al comenzar el día, protégeme. En tí pongo mi confianza como un niño en su madre, ayúdame. A tí abro mis proyectos y los planes de este día, acompáñame. A tí ofrezco lo que soy y lo que tengo, acógelo. A tí, que eres Dios de la vida, te pido fuerza. Mi corazón te ama y, lleno de gozo exulta en tí.
Bendíceme, Señor, guíame por el camino justo; defiéndeme, sé mi fortaleza. Que tus alas, Señor, me cobijen y guarden mientras yo voy viviendo el día de hoy. Amén.