10 de noviembre de 2022

A PESAR DE EXPERIMENTAR QUE CAMINO POR EL FILO DE UNA NAVAJA, SÉ Y CONFÍO QUE TÚ, SEÑOR CAMINAS CONMIGO

*ORACIÓN REFLEXIÓN*

A veces tengo miedo a que me falten las fuerzas para seguir luchando, esperando, soñando. Soy yo el que se enfrenta al mañana con el alma rota, con la vida herida. Pero hay una luz en medio de la noche que me persigue. Como una esperanza a medio hacer entre tantos intentos. Vuelvo a soñar con un mañana nuevo, diferente al que pensaba. Así es mi mirada, siempre elevada a lo más alto, atada a todas las estrellas. Me sujetan brazos que no veo, voces que no oigo, alientos que no siento. Estoy erguido en medio de un silencio atronador. Golpea con furia mi alma.

Pero siento que hay esperanza. No todo está perdido. Sonrío. Con la risa de los niños que empiezan a creer en lo imposible. No desfallezco porque sé que algo me espera detrás de ese nuevo día que amanece. Hay luz, hay vida, hay mañana, hay música. Acepto que no tengo todas las respuestas. Y que mis fragilidades son muchas más que mis fortalezas. Pero no me da miedo comenzar de nuevo a caminar despacio. A mi ritmo, con mi paso. Con la soledad rasgada sobre mi piel. Con los abrazos tendidos sobre mi alma. Sé que detrás de este hoy que arrastro hay mucha más luz, más cantos, más esperanza. Me abrazo a esa ilusión que se hace roca dentro de mí. 

(sermonje.eu)

Desde mi parroquia, por el párroco
D. Juan Carlos Medina Medina.